Historia

BREVE HISTORIA DEL SUPREMO CONSEJO DEL GRADO 33º DEL RITO ESCOCÉS ANTIGUO Y ACEPTADO DE LA MASONERIA PARAGUAYA

El Supremo Consejo del Grado 33º del Rito Escocés Antiguo y Aceptado para la República del Paraguay, fue establecido el 1º de Junio de 1871, siendo su primero Soberano Gran Comendador el Ilustre y Poderoso Hermano Doctor Juan Adrián Chaves 33º, Jefe del Cuerpo Médico de la Fuerza Naval del Brasil en el Paraguay, y su Lugarteniente el ilustre y Poderoso Hermano Hermes Ernesto da Fonseca 33º, Coronel del Ejército brasilero de ocupación en Asunción. Los Grandes Dignatarios casi todos eran Oficiales y Comandantes de buques de guerra brasileños y los hermanos de las Logias Simbólicas, en gran parte miembros del mencionado ejército.

En 1872 el Supremo Consejo del Grado 33º y el Gran Oriente del Paraguay promulgan el Código Masónico del Gran Oriente del Paraguay, en el cual se establece que está compuesto por el Supremo Consejo del Grado 33º del Rito Escocés Antiguo y Aceptado y de las dos Grandes Oficinas, a saber, el Gran Maestro de la Orden y la Gran Logia.

Con el retiro de las tropas brasileñas del territorio paraguayo quedaron abandonadas las Logias y, desprovistas de sus fundadores y jefes las Altas Oficinas, batiendo columnas el Supremo Consejo y Gran Oriente en Enero de 1876.

Posteriormente volvieron á establecerse en la Asunción algunas Logias, una bajo los auspicios del Gran Oriente Unido y Supremo Consejo del Brasil, otras bajo los del Supremo Consejo del Uruguay, otras independientes ó bajo los auspicios de Orientes no pertenecientes á los Supremos Consejos del Grado 33º confederados en Lausanne.

El Gran Oriente del Paraguay, en sesión del 2 de setiembre de 1895, adoptó como ley de la Masonería en ésta República el Código Masónico promulgado en el año 1872 por el Supremo Consejo y Gran Oriente del Paraguay con las modificaciones determinadas por la Constitución y el Tratado de Lausana de 1875, el cual fue promulgado por Decreto del 12 de setiembre de 1895 por el Gran Maestre Soberano Gran Comendador José Segundo Decoud 33º. A instancias del Supremo Consejo, el Gran Oriente del Paraguay obtuvo personería jurídica por Decreto de fecha 28 de junio de 1895 suscrito por el Presidente de la República del Paraguay Juan Bautista Egusquiza

Todas las logias y masones se unieron para, finalmente, el 22 de Febrero de 1896, ponerse bajo los auspicios del Supremo Consejo del Grado 33º del Rito Escocés Antiguo y Aceptado para la República del Paraguay reconstituido y establecido, definitivamente, el 3 de Enero de 1896, bajo la Presidencia del Gran Maestre Soberano Gran Comendador José Segundo Decoud 33º, con Poderes expedídosle por el Supremo Consejo del Grado 33º del Rito Escocés Antiguo y Aceptado para la República Oriental del Uruguay, entrando de este modo á formar parte de la Confederación de las Potencias Masónicas Escocesas. El Muy Poderoso Hermano Cristian G. Heisecke 33º, desde la reconstitución, fue el Soberano Gran Comendador del mismo.

Por las Grandes Constituciones del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, dadas en Berlín el día de las Calendas 1ºde Mayo de 1786 — atribuidas a Federico de Prusia– se dispuso agrupar y reunir en un solo cuerpo de Masonería todos los Ritos del Régimen Escocés, cuyas doctrinas son casi las mismas de las antiguas Instituciones dirigidas al propio fin, y que, no siendo sino ramas principales de un solo y mismo árbol, entre sí no difieren más que por fórmulas, hoy de todos conocidas, y que es fácil conciliar. Estos Ritos son los conocidos bajo los nombres de Rito Antiguo, de Heredom o de Hairdom, del Oriente de Kilwinning, de San Andrés, de los Emperadores de Oriente y Occidente, de los Príncipes del Real Secreto o de Perfección; Rito Filosófico, y finalmente, el Rito Primitivo, el más reciente de todos.

Adoptando como base de la reforma el título del primero de estos Ritos y el número de grados de la jerarquía del último, se declaró desde entonces y para siempre reunidos en una sola Orden que profesa el Dogma y las puras Doctrinas de la Antigua Francmasonería, abraza todos los sistemas de Rito Escocés bajo el nombre de Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

Así quedó establecido que la doctrina sea comunicada a los Masones en treinta y tres grados, divididos en siete Templos o Clases. Todo Masón está obligado a recorrer sucesivamente cada uno de esos grados antes de llegar al más sublime y último; y cada grado deberá pasar por los plazos y pruebas que le sean impuestos conforme a los Institutos, Decretos y Reglamentos antiguos y modernos de la Orden, y los del Rito de Perfección.

El primer grado está sometido al segundo, éste al tercero, y así sucesivamente hasta el grado sublime, el trigésimo tercio y último, que inspeccionará, dirigirá y gobernará todos los otros. Un Cuerpo o Reunión de miembros poseedores de ese grado forma un SUPREMO GRAN CONSEJO, depositario del Dogma, Defensor y Conservador de la Orden a la cual gobierna y administrará conforme a las Constituciones y a las que en adelante se promulgan.

Todos los grados de los Ritos reunidos, según arriba se dice, del primero al decimoctavo, se clasifican entre los grados del Rito de Perfección en su orden respectivo, conforme a la analogía y semejanza que entre ellos existen, y forman los dieciocho primeros grados del Rito Escocés Antiguo y Aceptado; el grado décimo nono y el vigésimo tercio del Rito Primitivo, forman el vigésimo de la Orden. El vigésimo y el vigésimo tercio del Rito de Perfección, o sea el décimo sexto y el vigésimo cuarto del Rito Primitivo, forman el vigésimo primero y el vigésimo octavo de la Orden. Los Príncipes Del Real Secreto ocupan el grado trigésimo segundo, inmediatamente después de los Soberanos Grandes Inspectores Generales, cuyo grado es el trigésimo tercio y último de la Orden. El grado trigésimo primero es el de los Soberanos Jueces Comendadores. Los Grandes Comendadores, Grandes Elegidos Caballeros Kadosh, toman el grado trigésimo. Los Jefes del Tabernáculo, los Príncipes del Tabernáculo, los Caballeros de la Serpiente de Bronce, los Príncipes de Merced, los Grandes Comendadores del Templo y los Grandes Escoceses de San Andrés, componen respectivamente los grados vigésimo tercio, cuarto, quinto, sexto, séptimo y noveno.

Todos los sublimes grados de esos mismos sistemas escoceses reunidos, son, según su analogía o identidad, distribuidos en las clases de su Orden que correspondan al régimen de Rito Escocés Antiguo y Aceptado.

Pero nunca y bajo ningún pretexto puede ninguno de esos grados sublimes ser asimilado al trigésimo tercio y muy sublime grado de Soberano Gran Inspector General, Protector y Conservador de la Orden, que es el último del Rito Escocés Antiguo y Aceptado; y en ningún caso podrá nadie gozar de los mismos derechos, prerrogativas, privilegios, o poderes que invisten a esos Inspectores.

Si bien las Grandes Constituciones en cuya virtud existen los Supremos Consejos del mundo, dan el derecho y la autorización para crear logias simbólicas, este derecho y autorización es ejercido con prudencia extrema, respetándose el principio de la separación de los Supremo Consejos y Grandes Logias existentes en su jurisdicción, por acuerdo asumido en la Cuarta Conferencia Internacional de los Supremos Consejos del Grado 33º del Rito Escocés Antiguo y Aceptado celebrado en París del 29 de abril al 4 de mayo de 1929.

El Supremo Consejo del Grado 33º es la Suprema Autoridad del Rito Escocés Antiguo y Aceptado en la República del Paraguay. Conforma la Confederación de Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado y Conferencia Internacional de los Supremos Consejos del Grado 33º desde su reconstitución. El 1º de junio de 2021 cumplió el 150º Aniversario de su fundación y ha sido nominado como sede de la Conferencia Internacional a realizarse en el mes de Julio de 2022 en Asunción, siendo en la actualidad, su Soberano Gran Comendador, el Ilustre y Poderoso Hermano Jorge Goldenberg 33º, Vicepresidente de la Confederación.